Fotografía infantil
Resulta desafiante y divertido fotografiar niños y es que son impredecibles. A veces los adultos nos empeñamos en las sesiones de fotos de niños, por supuesto con la mejor de las intenciones, en obtener esa instantánea que nos apetece conservar como recuerdo de nuestros pequeñajos. Y la fotografía infantil a mi parecer debe ser espontánea, divertida y lo más parecido a un rato de juegos. Al final casi siempre descubrimos que en la espontaneidad se encuentra la verdad y curiosamente, por más pretensiones que tuviéramos del reportaje, es en ella donde realmente reconocemos a nuestros pequeños.
Ella es Miriam
Conozco a esta pequeña desde hace mucho tiempo, la he visto crecer y la he fotografiado en muchas ocasiones. Tenerla frente a mi cámara siempre genera entre nosotras una conexión especial que tal vez nunca podamos llegar a lograr con palabras. Es una niña inteligente, comedida y algo tímida pero con una imponente mirada que no parpadea cuando la miras fijamente a través del objetivo.
Y es ahí donde está la magia, sin pretenderlo, sin esperarlo. Ese es el encanto de los niños y es sin ninguna duda, el encanto de Miriam.