Estuvimos meses intentando cuadrar un día para poder hacer este reportaje familiar en La Corchuela (Sevilla). No era la primera vez que hacía fotos a los chicos de esta pareja tan encantadora y que suerte la mía que finalmente encontramos el día y lugar perfecto para hacer esta sesión.
Como os decía, Mari Carmen, la mamá, no era la primera vez que contrataba un reportaje conmigo. Sin embargo esta era una sesión especial pues participaría toda la familia. Cuando digo toda la familia, me refiero a todos y eso incluía a Cuco e Ítaca. Dos preciosos galgos de dulce mirada que interactuaron con sus dueños a la perfección. Querían hacer algo en el campo, espontáneo y casual y La Corchuela nos ofrecía sin duda alguna el entorno perfecto para lograr esas instantáneas.
La Corchuela es un gigantesco parque rodeado de árboles y repleto de lugares por donde perderse. Aunque fue un grato descubrimiento para esta familia, amantes del campo y la naturaleza. Yo no era la primera vez que hacía fotografías en estos parajes. Y sin duda, tras la experiencia, me encantará repetir pues cada vez que voy descubro nuevas bondades de este enclave maravilloso.
Ésta es una familia es encantadora y estos hermanos son unos chicos majísimos que estaban encantados con la idea de hacerse fotos y eso sin duda alguna es parte esencial de esta receta. Como siempre digo, en los reportajes de fotos con niños es muy importante que para ellos esto sea como un juego. Que se diviertan, aporten ideas, posen sin ser forzados y que simplemente se comporten como niños son las reglas principales de este pasatiempo. Emilio y Ana lo hicieron genial. Son amigables, divertidos e incluso diría que con alma de modelos, por lo que hacerse fotos siempre es buena idea.
Sobran más explicaciones porque no hay más que observar su actitud en las fotos. Ojalá nos tropecemos muchas veces y sigamos retroalimentando esta conexión tan chula que se da siempre que nos encontramos.