Si algo tenía claro esta pareja es que, ya que no podrían acompañarles el día de su boda, querían hacer su reportaje de preboda con sus amigos Coco y Timón, una pareja adorable formada por un chiguagua y un gran danes, que son sin duda parte de la familia. Me encantan los animales. Para mi son parte de la familia, así que allá que nos fuimos con ellos a la ermita de Gerena. Estos educadísimos perros se portaron de cine. Fue fácil poder contar con ellos en algunas de las fotografías que hicimos allí.
Después, dejando ya a los perros descansar con los “abuelos”, Miguel nos llevó por los algunos de los lugares más recónditos que rodean el municipio de Gerena, donde la naturaleza, a pesar de estar bien adentrados en julio rebosaba de un frondoso paisaje propio de primavera. Un río, unas ruinas de un antiguo puente romano y un enorme montón de balas de paja como improvisado escenario fueron el colofón de una sesión estupenda.
Disfrutamos de lo lindo de esta calurosa tarde de verano y estas fotos son el preludio de una boda que se presenta preciosa.